La tecnología avanza a pasos agigantados en nuestra industria, ya podemos ver trayectos de prueba en Texas, EEUU, realizados por camiones que se manejan solos, es decir, sin un humano al volante que los opere físicamente. Empresas como Waymo de Google o la Startup Embark, han logrado con éxito implementar esta autonomía, que funciona con radares, escáneres láser, cámaras y antenas GPS que se comunican con un software de pilotaje. Puede que sea un motivo de celebración, en especial para los que administran flotas, pero para los que somos conductores, la innovación resulta algo preocupante.
Sin embargo, también es importante decir, que estos camiones dependen de factores geográficos y necesidades específicas para operar. En Latinoamérica, aún falta tiempo para que se le de el paso a los camiones autónomos, pero sin duda llegarán, es una realidad que pueden ser más rentables, ya que podrán hacer trayectos muy largos sin necesidad de descansar y en menos tiempo.
Debemos prepararnos colegas, seguramente para trayectos no tan largos y donde la geografía sea más desafiante, nuestra experiencia al volante será indispensable; en cuanto a lo otro, también podemos verlo como una oportunidad, podremos incursionar en otros campos, como desde la virtualidad, monitoreando y haciendo seguimiento a los camiones autónomos en sus trayectos.
Adaptarse es parte de la vida, y si hemos podido adaptarnos a cualquier ruta, a los diferentes climas, a los retos más duros y demás, también podremos adaptarnos a las nuevas tecnologías y sacarles provecho.
- Juan Rueda
